Había que hacer tres goles y el equipo de Pablo Aimar se quedaba en un 2-0. El equipo había estado ahí del 3-0, en una salvada sobre la hora y en la línea del equipo verdeamarillo.
Argentina se quedaba afuera del Hexagonal final, instancia en la que se definían las plazas al Mundial de la categoría. Pero en la última jugada del partido, el defensor de Belgrano, Bruno Amione, metió el 3-0 y el pase a la instancia decisiva.