El presidente Mauricio Macri almorzará este martes con miembros de la Corte Suprema de Justicia, en un momento de tensión por los fondos presupuestarios y porque se aproxima un fallo clave sobre las jubilaciones de 150.000 personas.
A las 13:00, el jefe de Estado recibirá en la Casa de Gobierno al presidente de la Corte, Carlos Rosenkrantz, y a otros dos miembros del máximo tribunal de Justicia que no habían sido confirmados.

Este será el primer encuentro formal entre Macri y la Corte después de que Rosenkrantz –designado por la gestión Cambiemos- asumiera la presidencia del máximo tribunal el 1 de octubre pasado.

La Corte le había solicitado hace una semana al Gobierno aumentar el giro de fondos para que los salarios del Poder Judicial sean incrementados un 20% antes de fin de año, con el objetivo de alcanzar un alza del 40% en 2018.

La solicitud fue realizada a través de una nota formal enviada por el máximo tribunal de justicia al jefe de Gabinete, Marcos Peña. El Gobierno reconoce que la inflación de este año superará el 42%.

El pedido consiste realizar una modificación presupuestaria para enviar unos 1.605 millones de pesos extra al Poder Judicial. De ese total, 205 millones serán administrados por la propia Corte y el resto, 1.400 millones de pesos, por el Consejo de la Magistratura.

Pero lo que más preocupa al presidente Macri es un tema sobre el que la Corte debe fallar antes de fin de año: actualización de las jubilaciones. Existe un litigio para que se aplique un índice de mejora a los haberes que podría tener fuerte impacto en las arcas públicas.

Hasta el momento es probable que tres de los cinco jueces (Ricardo Lorenzetti, Juan Carlos Maqueda y Horacio Rosatti) apoyen el reclamo de los jubilados en contra de los deseos del Gobierno.

El reclamo fue iniciado por Lucio Orlando Blanco, quien se jubiló en 2003 con un haber inferior a la mitad del sueldo promedio. La Sala II de la Cámara de la Seguridad Social, con los votos de los jueces Nora Carmen Dorado y Luis Herrero, le dio la razón a Blanco quien debería cobrar una jubilación superior en un 31 % a la que le ofrece la ANSES con la Reparación Histórica.

Esos jueces ordenaron que se aplique el índice de Salario Básico de la Industria y la Construcción en lugar de la Remuneración Promedio Imponible de los Trabajadores Estables (RIPTE) que elabora el Ministerio de Trabajo y que fijó la ley promovida por la gestión Macri.

En casi en la totalidad de los casos con la aplicación del RIPTE los haberes y retroactivos son inferiores a los que se obtendrían utilizando el otro índice. Por ello, la Corte tiene en sus manos un fallo que podría costarle varios cientos de miles de millones al Estado, o no.