El encargado de un edificio en la calle Buenos Aires explicó cómo funcionan los protocolos de seguridad ante fallas en los ascensores y destacó el rol de las empresas de mantenimiento que operan las 24 horas.
ENCARGADO
Javier De Olmos
“El ascensor puede tener algún inconveniente, porque son máquinas, pero todo tiene su medida de seguridad”, explicó el encargado de un edificio sobre la calle Buenos Aires con respecto a los protocolos de seguridad de los ascensores. Aseguró que, si bien pueden producirse trabas o detenciones entre pisos, “nunca una persona queda mucho tiempo adentro de un ascensor”.
Según relató, la ciudad cuenta con guardias permanentes de mantenimiento que operan las 24 horas, tanto en el microcentro como en zonas más alejadas. “Ante un problema, la empresa que tiene el mantenimiento llega rápido y soluciona”, afirmó.
Aunque nunca vivió un accidente grave como una caída de cabina, el encargado recuerda situaciones de personas atrapadas que se resolvieron sin consecuencias. También aclaró el protocolo a seguir: “Primero se destraba el ascensor para que vuelva a planta baja, y si hay algún herido, se llama a la ambulancia”.
Finalmente dijo que, ante una emergencia, “no hay que llamar primero a los bomberos, sino a la empresa responsable del mantenimiento, cuyo número siempre debe estar visible en la cartelería del ascensor”.
Por su parte, el director de Defensa Civil, Javier De Olmos, ratificó que el funcionamiento de ascensores está a cargo del consorcio de un edificio, aunque destacó que el ente que depende del municipio está autorizado a constatar las tarjetas de mantenimiento.