El Festival "Sabores del Maní", que identifica a General Cabrera con su principal producto, nació de una necesidad de identidad local durante la gestión de la ex intendenta Carolina Eusebio. En sus inicios, el miedo al fracaso era palpable.

Marcos Carasso, ex intendente de Cabrera y fanático de su ciudad, recordó la cautela con la que se organizó la primera edición: "Lo hicimos en un galpón cerrado, en un club cerrado, teníamos miedo". La expectativa era baja, incluso dudaron de la asistencia a las clases de cocina: "Y pongamos 50 sillas, ¿quién va a venir en Cabrera a ver una clase de cocina? No están acostumbrados".

Sin embargo, la respuesta superó el temor: "Ese día había como 200 personas viendo la clase de cocina y se veía que había un potencial enorme". Este éxito inicial impulsó el evento, que ha ido "creciendo año a año" hasta convertirse en una fiesta "regional" y "provincial".

Motor de Desarrollo y Crecimiento

Para Carasso, el festival va más allá de la celebración; es una plataforma para "mostrar... el potencial productivo que tiene... la región, el centro-sur de Córdoba". Este impacto genera un "círculo virtuoso" que beneficia a toda la comunidad, combinando educación, actividad privada y gestión pública.

"Nos potencia y nos da un poco de esperanza y de optimismo en un contexto tan complejo como el que estamos viviendo", afirmó Carasso. El festival consolida a Cabrera como un lugar que, aunque no resuelve todos los problemas, sí ofrece a sus habitantes "las mismas oportunidades de crecimiento" e "invita a crecer y a pensar que podés desarrollarte con tu familia, profesionalmente o a través de un servicio en nuestra ciudad".

El Secreto del Éxito: Trabajo Colectivo

Andrés, parte del equipo organizador, destacó que el éxito sostenido no es casual, sino una "causalidad del esfuerzo que hemos hecho acá". Resaltó que desde el día uno, la filosofía fue clara: "Esto o lo hacíamos entre todos o no salía".

La organización requiere una logística intensa, con equipos municipales (Espacio Verde, Corralón, Obras Públicas) trabajando mancomunadamente y sintiendo el evento como propio. "La gestión municipal es muy fuerte" y "todos están aportando su granito de arena, su su voluntad", aseguró Andrés. Este trabajo coordinado, pulido a lo largo de 11 ediciones, permite que el festival mantenga su "dinamismo" y sea "divertido de ver" para el público.

INFORME 16