Juan Vasquetto, economista y especialista en agronegocios, analizó el complejo escenario internacional que enfrenta el sector agronómico. Explicó que el cierre parcial de la administración estadounidense “ha dejado sin funcionamiento a organismos no esenciales, entre ellos el Departamento de Agricultura de Estados Unidos”, lo que impide la publicación de los informes clave del USDA.

Según Vasquetto, la falta de estos datos genera “un mercado tranquilo, sin grandes sobresaltos, esperando a que aparezca alguna señal fundamental”. El experto remarcó que la situación también preocupa a los productores norteamericanos, que esperan una ayuda oficial de unos 15 mil millones de dólares debido a la baja rentabilidad, sobre todo en el caso de la soja. “Estados Unidos no está vendiendo soja a China, entonces esto empieza a preocupar. Empieza a preocupar la falta de espacio y la caída de la rentabilidad”, señaló.

Para Vasquetto, esta ayuda podría tener impacto global: “Cuando una potencia subsidia la producción agropecuaria de un producto, genera una sobreoferta y los precios internacionales caen”.

En cuanto al panorama local, sostuvo que el mercado argentino “todavía sigue influenciado por el efecto de las retenciones cero”, lo que permite a los productores aprovechar parte de la suba generada por esta medida.
Por eso, fue contundente: “Es un buen momento para vender soja. Sí, es optimista. Cúbrase al alza con instrumentos financieros o busque algún activo de refugio”, recomendó.

Finalmente, el especialista destacó la necesidad de profesionalizar la gestión en el campo: “El productor agropecuario no solo tiene que saber de producción, sino que también la gestión financiera es una materia importante”.

INFORME 16