Así lo indicó el organismo este jueves al difundir un nuevo Índice de Precios al Consumidor (IPC). Es el dato más bajo en cinco años. Tras la salida del cepo, la inflación en abril había sido de 2,8%.
Antes de lo que esperaba el mercado y con una variación por debajo de lo proyectado por los analistas privados, la inflación quebró el piso simbólico del 2% en mayo. La suba de precios produjo sorpresa: fue de 1,5% el mes pasado -la más baja en casi cinco años- como consecuencia principalmente la desaceleración en los alimentos.
La variación mensual es la menor desde mayo de 2020 (1,5%), en plena cuarentena por el coronavirus, cuando el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner mantenían precios máximos por decreto y la actividad económica estaba en una profunda crisis. La diferencia con la actualidad es que los precios hoy son libres en el marco de un proceso de estabilización económica con ajustes de valores relativos y una economía sin cepo para personas físicas.
En lo que va del año, la inflación acumuló 13,3%, mientras que en doce meses sumó 43,5%, según informó el Indec. La inflación núcleo marcó 2,2%, o sea, mostró una desaceleración de un punto.
La división de mayor aumento en el mes fue Comunicación (4,1%), por alzas en Servicios de telefonía e internet. Le siguió Restaurantes y hoteles (3%), por las alzas en Restaurantes y comidas fuera del hogar. Los capítulos que registraron las menores variaciones en mayo de 2025 con respecto al mes previo fueron Alimentos y bebidas no alcohólicas (0,5%) -hubo caídas en precios de frutas y verduras- y Transporte (0,4%).