En diálogo con Valor Agregado Agro, dejó en claro que ni él ni sus colegas se sienten representados o acompañados por el arco político provincial y nacional.  “Creo que todos estamos pasando por momentos muy difíciles. Se dice que el productor agropecuario no paga Ingresos Brutos, pero no es cierto. Sí pagamos, tanto los productores como los contratistas”.

El productor y empresario dijo que paga  el 4% sobre cada factura, sin IVA. “Es una barbaridad”, afirmó Cartuccia,  y añadió que el problema de fondo no es sólo la alta carga impositiva, sino que el impuesto se aplica sobre el total de la factura, sin tener en cuenta los costos asociados al servicio que brinda: “El productor tiene insumos, repuestos, y nosotros también. Tenemos repuestos, combustible, seguros, sueldos”, enfatizó .

La alta carga de los dos estados

Cartuccia hizo una comparación que deja en evidencia el peso fiscal que soportan quienes trabajan en el campo: “Si sumás el 4% de Ingresos Brutos provincial con el 35% de carga nacional, estamos hablando de casi un 50% de impuestos sobre el bruto. Si fuese sobre la ganancia neta, bueno, sería más lógico. Pero así, no”.

Un pedido claro al gobernador

Consultado sobre qué le pediría al gobernador Martín Llaryora, fue contundente: “Yo le diría: señor gobernador, si dicen que los productores están exentos, que también lo esté el contratista. Y si no se puede, que al menos bajen la alícuota, y que se cobre sobre lo que queda limpio, no sobre una factura bruta. Es imposible trabajar así. No se puede más”.

Promesas incumplidas

Cartuccia también recordó un episodio reciente que lo marcó. En menos de dos años, dos galpones suyos fueron destruidos por tormentas. Participó de una reunión con funcionarios del gobierno provincial, donde le prometieron asistencia.  “Fue por noviembre o diciembre, en Río Seco. Dijeron que iba a haber ayuda. Llenamos planillas, nos prometieron algo. Pero a los pocos días me llamaron del Banco de Córdoba para decirme que tenía 40 millones de pesos disponibles 2026 ¡pero era un crédito al 40%!”, contó. “Eso no es ayuda. Eso es un préstamo. Yo les dije: no quiero que me regalen nada, pero exímanme cinco años de Ingresos Brutos y con eso levanto el galpón”

Finalmente, cerró con una reflexión amarga: “El gobierno que se fue y el que está ahora… todos igual. Los gringos del campo y los contratistas siempre somos la última legión del tallo”.

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