La Sociedad Rural de Río Cuarto se encuentra en alerta ante los incrementos en los impuestos inmobiliarios rurales, que superan ampliamente los porcentajes anunciados por el gobierno provincial.

Según el presidente de la entidad, Heraldo Moyetta, los aumentos en los cedulones de este año superan el 200%, cuando se había anticipado un tope de 172,5%.

En diálogo con Informe16,  Moyetta explicó que las autoridades provinciales habían prometido que los incrementos no superarían el 172,5% respecto al año pasado, un porcentaje que equipararía el aumento del impuesto rural con el de los inmuebles urbanos. Sin embargo, al llegar los cedulones a los productores, la realidad fue muy distinta: "Nos encontramos con aumentos de entre el 210% y el 350%, lo cual implica una carga mucho mayor para los productores. Si el año pasado se pagaban 100 pesos, este año se está exigiendo el pago de 300 o hasta 350 pesos", afirmó Moyetta.

El presidente de la Sociedad Rural también destacó que, si bien los cálculos del impuesto se sustentan en una fórmula matemática, hay factores que afectan al productor, como la eliminación de descuentos y la falta de previsibilidad en los montos. "La matemática es clara, pero la realidad es que el productor no está pagando lo que le dijeron, sino mucho más", aseguró. En ese sentido, Moyetta señaló que la desinformación también ha sido un factor que complica la situación, sobre todo con respecto a los vencimientos de los pagos. "El gobierno no ha comunicado de manera clara cuando se deben abonar los impuestos, generando incertidumbre y malestar en los productores", explicó.
 
“Uno se siente traicionado por el gobierno de Llaryora que te dice una cosa sobre el impuesto rural y después los productores rurales reciben los cedulones con incrementos por encima de la publicado por el gobierno de Córdoba”, destacó el productor rural.

El presidente de la Sociedad Rural también subrayó que es necesario revisar los cálculos y garantizar que los aumentos sean justos para todos los productores, sin discriminación. "Lo que pedimos es que se haga una revisión de los aumentos, porque si no se tocan las bases imponibles, el aumento debería ser el mismo para todos. Sin embargo, los aumentos son desproporcionados en muchos casos", manifestó.

Finalmente, Moyetta expresó la necesidad de que las entidades intermedias se acerquen a los productores para entender la magnitud del malestar y transmitirlo de manera efectiva a las autoridades provinciales. "Nosotros estamos a favor de los productores, pero a veces nos sentimos incomprendidos", concluyó.