En el Día Mundial de las Abejas, desde La Vuelta del Perro nos contactamos con el presidente de la Cámara Argentina de Fraccionadores de Miel, Carlos Levin, quien señaló que desaparecerían 200 mil especies vegetales de la faz de la tierra si la abeja dejará de existir. 

Una colmena de abejas se compone por la reina, las obreras y los zánganos. Dentro de ella la abeja vive solo siete semanas y no son aceptadas las que tienen capacidades diferentes por lo que cuando se siente morir se va fuera de la colmena para evitar la contaminación de su familia.

Así lo señaló el Ingeniero e indicó que pueden hacer hasta 60 viajes diarios en búsqueda de néctar, polem o agua para la alimentación de la colmena.

Si bien es un animal liviano, puede llevar hasta el doble de su peso cuando busca néctar o polem en el campo para lo cual vuela a 60 kilómetros por hora y al ingresar a la colmena reduce su velocidad a cero.

Indicó que la reina vive cinco años en la colmena y a los dos años se cambia quien cumplirá este rol porque deja de emanar feromonas que dar orden social y laboral.

El presidente de la Cámara, destacó que la actividad de la apicultura trabaja con el 95% de los insumos nacionales.

Se refirió a la paradoja de la promoción de una vida saludable, de dieta sana con la desaparición de los montes y sus especies vegetales. Asoció esta realidad, a un problema de enseñanza y aprendizaje que genera gran desinformación en la gente.

Sostuvo que es posible la convivencia entre la agricultura de hoy y los apicultores, para lo cual consideró necesarias políticas públicas, el acompañamiento del sector privado y el convencimiento de cambiar prácticas sociales para vivir en un medioambiente sustentable.