Así lo expresó la dueña de la quinta donde se realizó una fiesta ilegal en la localidad de Sampacho. El marido de Ana Quiroga fue golpeado en la cabeza por un grupo de adolescentes que se encontraba en el lugar.
Ana Quiroga
En la madrugada del domingo, cerca de las 2:30, Ana Quiroga, junto a su marido e hijo, observaron que en su propiedad, una quinta que no estaba habitada, sobre Ruta 8, se estaba realizando una fiesta clandestina.
Quiroga expresó a Radio Río Cuarto que era impresionante la cantidad de chicos que salían de todos lados, aproximadamente 150.
“Cuando llegamos todos empezaron a correr, era una marea de 150 personas que corrían alrededor nuestro, de la multitud que había nos separamos con mi marido y no nos encontrábamos. Cuando veo que había chicos que no se movían en un lugar, eran 8 personas que pateaban a mi marido en la cabeza. La mayoría salió corriendo, si nos hubiese pasado algo hubiera sido terrible porque nuestro nene de 4 años estaba en el auto, y observó todos los hechos”.
Señaló que efectuó una denuncia penal porque su esposo recibió golpes en la cabeza y también por roturas y faltantes en la vivienda.
“En la entrada se les indicaba donde pasar, había luces, parlantes a batería, no había luz en el lugar, dimensionamos la cantidad de gente cuando salieron de la quinta, estaba en todos lados. Hicieron destrozos en la casa, forzaron las puertas, las ventanas. Ya está la denuncia hecha, también se comenzará una causa penal por lo que le pasó a mi marido y hay una denuncia civil y moral” manifestó
Ana Quiroga, quien agregó que la convocatoria fue a toda la zona a través de las redes sociales.