A partir de la denuncia de Meghan Markle contra el grupo editorial Associated Newspaper Limited por cinco artículos que se publicaron en febrero de 2019 en sus periódicos Mail on Sunday y MailOnline, apareció un curioso dato sobre su suegro, el príncipe Carlos.
En una serie de documentos judiciales sobre la declaración de un testigo presentados por los abogados que representan a la exestrella de Suits ante el Tribunal Superior de Londres, la abogada Jenny Afia planteó una serie de anécdotas y afirmaciones que surgieron en Finding Freedom, el libro de Omid Scobie y Carolyn Durand sobre los duques de Sussex.

Una de esas expresiones que fueron consideradas "inexactas" para los letrados se refiere al padre del príncipe Harry, Carlos. "Harry comenzó a enviar mensajes de texto y llamar a amigos y familiares con la feliz noticia de la llegada de Archie (el hijo de los Sussex). Comenzó con la reina y el príncipe Felipe, quienes fueron los primeros en conocer la noticia de la llegada de su octavo bisnieto", figura en la biografía.
"Entonces envió un mensaje a su padre y a su hermano junto a una foto de su nuevo hijo, para luego notificar a otros miembros de la familia, como la hija de la princesa Ana, Zara, y su marido, la leyenda de rugby Mike Tindall, a través del grupo de WhatsApp del que formaban parte todos los miembros de la realeza", sigue el libro.

Sin embargo, la abogada Afia hizo referencia sobre este pasaje y, sin saberlo, dio a conocer una desconocida información. "Tengo entendido que es ampliamente conocido que el príncipe de Gales no tiene un teléfono móvil", sostuvo.
"Se irrita cuando la gente empuja con sus teléfonos", reconoció John Birdcut, quien pasó un año con el heredero al trono filmando el documental para la BBC. "Quiere conocer gente y le irrita que le pongan teléfonos con la cámara en la cara", indicó, develando que el príncipe Carlos detesta las selfies.

Sin embargo, las fotos con cámaras frontales no solo molestan a Carlos, sino que Harry también admitió que él también las odia. "En serio, debes dejar de hacerlo. Sé que eres joven, pero las selfies son malas. ¡Solo toma una fotografía normal!", le dijo a una admiradora que quiso tomarse una foto con él.
Incluso Isabel II reconoció que le resulta "desconcertante" y "extraño" cuando se enfrenta a las personas que intentan tomarse selfies con ella. Además, la reina considera de "mala educación" que la gente esté mirando una pantalla cuando ella realiza algún tipo de aparición pública.