Los profesiones venezolanos fueron atravesados por la pandemia en su llegada a Río Cuarto en busca de un futuro mejor y hoy atraviesan una crítica situación. Hoy subsisten con las viandas del comedor María Madre de Dios.
Tal es el caso de María Elena Quijada quien se encuentra en nuestra ciudad con una hija y su esposo.
La familia llegó los primeros días de marzo con posibilidades de trabajo y todo quedó en la nada, sin embargo aseguran que no pierden las esperanzas.
María Elena es odontóloga y aún no a podido legalizar su titulo.