En una reunión realizada en la ex sala del Consejo Directivo de la Facultad, autoridades de Agronomía y Veterinaria hicieron entrega del informe final del censo del arbolado urbano a representantes de la Municipalidad de Río Cuarto. La actividad se concretó a partir de un convenio firmado entre la UNRC y el municipio.

Por parte de la Facultad de Agronomía y Veterinaria estuvieron el decano Sergio González; el secretario de Extensión y Servicios, Alfredo Ohanian; los ingenieros Cristina Somma y Sergio Estévez. Por parte de la Municipalidad se contó con la presencia del coordinador de Gestión Ambiental e Higiene Urbana, Mariano Mancinelli, y el concejal Armando Chiappe.

Sobre el proyecto conjunto, el decano destacó: “Esto es sumamente importante no sólo para el Municipio y la Facultad, sino para toda la comunidad de Río Cuarto. Siempre recalco la importancia de estas vinculaciones porque se puede brindar respuestas a las problemáticas. Esto es parte de una política muy firme y sostenida de apertura de la Facultad hacia el medio, de aportes concretos”.

Según consideró el profesor González: “Es una manera de poner todos los conocimientos al servicio de la comunidad, y para nosotros también es muy útil porque este relevamiento puntual fue hecho por estudiantes de la carrera Ingeniería Agronómica que cursan una materia específica, siendo una adelanto a lo que sería una práctica profesional y una potencial salida laboral”.

A su turno, el coordinador de Gestión Ambiental e Higiene Urbana señaló que es un proyecto que vienen trabajando desde fines de 2016. “Hoy ya tenemos los datos de esto que partió de una preocupación del gobierno municipal, al asumir en el ejecutivo y encontrarnos con una falta de información en el espacio verde, de conocer cuántos árboles hay, que tipo de especies, ver sus estados. A partir de eso se le solicitó a la Universidad y a la Facultad, este relevamiento, que va a ayudar a revertir esta situación”.

“Tras el censo nosotros podemos conocer el árbol que está en riesgo, hasta incluso para terceros, identificando el faltante. Sobre todo lo que vamos a hacer con el Consejo del Árbol es una planificación sobre qué tipo de árbol tiene que ir por cada cuadra, lo que nos va a permitir tener normalizados los servicios en cuanto a la poda, al barrido y a que el árbol no interfiera con otros servicios para evitar que se pode con la línea media de tensión”, indicó Mancinelli.

Y agregó: “Con estos datos, y continuando con nuevos relevamientos, vamos a poder suplir la falta de información que tenía el área y empezar a atener datos públicos que nos permitan mirar a la ciudad de manera amigable con el arbolado y con el ecosistema”.

En tanto, el concejal Chiappe valoró la transferencia de un conocimiento objetivo por parte de la Universidad a la gestión municipal y en el caso concreto del consejo del arbolado que permita planificar de acuerdo a las ordenanzas que se tiene.

En cuanto al censo realizado, la profesora Somma precisó: “Se relevaron aproximadamente unos 8 mil árboles, de los cuales 4 mil lugares se detectaron que eran faltantes, es un número importante. Siempre se dijo que la ciudad tenía pocos árboles, ahora con estos datos los podemos estar comprobando, que es un número llamativo. Por eso habría que hacer una autoevaluación sobre la ciudad que queremos y empezar a mejorar”.

Además, expresó: “Otro dato del relevamiento es que muchas plantas están en estado crítico, nos preguntamos por qué están en mal estado y esto surge por la falta de criterio al memento podar. Tanto el vecino como alguna empresa privada realizan podas que no respetan las cuestiones fundamentales de la práctica en sí. Eso genera pudriciones internas de la planta, que a lo largo de los años genera plantas riesgosas, de modo que es fundamental la capacitación en este tema”.

Fuente y Fotos: UNRC