Un nene de 7 años apareció muerto al interior de un freezer en el negocio de sus padres en la localidad rionegrina de San Antonio Oeste. La policía informó que el cuerpo será trasladado a Viedma para realizar la autopsia, pero trascendió que no presenta lesiones y que podría haber sido víctima del congelamiento. Las hipótesis van desde una fatalidad hasta las sospechas sobre la posible participación paterna en su dramático final.

El chico, Jairo Rodrigo, era intensamente buscado desde ayer por la Policía de San Antonio Oeste. También los vecinos habían armado grupos de voluntarios que se extendían a lo largo y ancho de la localidad. Jairo fue visto por última vez con vida minutos antes de ir a jugar con sus amigos. Desde entonces no se supo nada sobre su paradero. La policía rionegrina entregó una fotografía a los medios regionales en la que se observa a un niño delgado, de pelo corto y sonriente.

Hoy alrededor de las 5 de la madrugada el cuerpo fue encontrado en un freezer que utilizan sus propios padres en su almacén y carnicería. El aparato está ubicado en el patio delantero de la propiedad. Se presume que el pequeño llevaba varias horas en su interior. La policía local aseguró que no descarta ninguna teoría. Al momento de hallar el cuerpo, el freezer estaba cerrado con un candado. Sin embargo, esto abona tanto las hipótesis de una fatalidad -que el niño se haya escondido en su interior para quedar atrapado- o un delito -que los padres con acceso a la llave lo ocultaran allí-.

Según informó a radio LU19 el comisario de San Antonio Gustavo Verdugo, el operativo de búsqueda se inició ayer a las 19, luego de que la madre del menor realizó la denuncia en la comisaría. Del rastrillaje participaron policías locales, una gran cantidad de vecinos de San Antonio Oeste y hasta se usaron perros. Por la noche, policías y vecinos se dieron cita en la comisaría de la localidad con las manos vacías aunque dispuestos a reanudar las pesquisas.

Finalmente el cuerpo fue descubierto en el freezer del almacén. No trascendieron detalles de cómo ocurrió esto. “Estamos realizando las pesquisas con la fiscal en este momento, todo lo que te puedo decir es que está en materia de investigación, sí te puedo confirmar que el pequeño apareció muerto en una heladera, en un patio de su casa, en la parte de adelante”, confirmaron fuentes de la investigación.

Fuentes del barrio indicaron que el freezer del almacén por lo general tenía puesto un candado para evitar que les roben el hielo a sus dueños. Los padres tuvieron que ir a declarar a la comisaría local.

Clarin