Un milagro tuvo lugar el domingo por la madrugada en el oeste de la ciudad. Un niño vino al mundo en plena vía pública, con la ayuda de su padre y de tres policías. La feliz noticia llegó a Radio Río Cuarto y el padre del niño recién nacido, Franco Pallaroni, relató los emocionantes momentos previos al parto de Luca.
 
La familia de Franco vive en un barrio alejado de la ciudad, en el sector oeste, con acceso por la Ruta Provincial 30. Como sabían que se acercaba la fecha del parto, estaban preparados para ir hasta la cínica y recibir a su hijo.
 
Alrededor de las 07,30 del sábado, Cecilia, madre de Luca, comenzó con contracciones, con diferencia de 4 a 6 minutos. Ante eso, Franco decidió llevarla a la Clínica del Sud para corroborar si entró en trabajo de parto. Lamentablemente, todo fue una falsa alarma porque el cuello del útero aún estaba posterior.
 
La pareja volvió a su casa, algo desilusionados, expectantes por novedades. Recién a eso de las 21, las contracciones volvieron cada 4 minutos exactos, durante hora, hora y media. Como tenían todo listo, ambos partieron nuevamente para la clínica.
 
Pero, el recorrido de su casa al nosocomio se vio interrumpido ya que debieron parar varias veces para que Cecilia encuentre una posición adecuada y cómoda dentro del automóvil. Luego de lograr recorrer algunas cuadras hasta la puerta del barrio, el oficial de guardia, Lucas Duarte, le preguntó a Franco lo que sucedía.
 
El padre contestó que su mujer estaba entrando en trabajo de parto. Hábilmente, el policía decidió llamar a una ambulancia y a otro patrullero. La ambulancia nunca llegó, pero el móvil policial se presentó en segundos. Mientras tanto, Cecilia debió abandonar el automóvil porque le resultaba incómodo y se recostó en la calle, sobre una colcha.
 
En ese instante, los policías Duarte, Rossi y Rivarola asistían y tranquilizaban a la pareja y Franco decidió llamar al obstetra Dr. Marcelo Lafalce, quien se encontraba a pocos kilómetros del lugar, para recibir indicaciones sobre el trabajo de parto.
 
El momento de la verdad había llegado porque Cecilia rompió bolsa. “Por un recuerdo con el parto de mi otro hijo y por lo que nos dijo la obstetra, si se rompe bolsa, el bebé se viene abajo y no hay nada que hacer”, relató para Radio Río Cuarto.
 
“Cuando Ceci rompió bolsa, no me dio tiempo para nada. Gracias a Dios que estaba contenido por los policías, pude recibir a mi tercer hijo, Luca. En ese momento, lo agarré, lo tapé y lo sostuve. Estaba estresadísimo”, manifestó Franco, el padre del recién nacido.
 
Después de toda esa acción, los padres y el bebé se trasladaron a la Clínica del Sud con la ayuda de los tres policías. Los uniformados, desde su lugar, habían ayudado a la pareja y se convirtieron en los héroes de la noche.
 
Al llegar al nosocomio, el niño fue internado en observación por 48 horas para verificar que se encuentre en óptimas condiciones de salud.



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