La sede de la vecinal Villa Dalcar fue clausurada el pasado fin de semana por haberse realizado una fiesta en un local donde no está permitido eventos de esa índole.
Ante dicha situación, el presidente de la institución, Pablo Brizzio, dialogó con LV16 y explicó que el salón se alquiló a un tercero con otra finalidad. “Nos dijeron que iba a ser una fiesta familiar y termino siendo utilizado para otra cosa”, reclamó.
Brizzio indicó que no alquilan el lugar para fiestas, sino para eventos familiares, charlas o cenas. “Fuimos engañados en nuestra buena fe”, expresó.
Ahora planteó que evalúan la posibilidad de rever procedimientos para que este hecho no vuelva a ocurrir. A su vez, dijo que ya iniciaron acciones judiciales para quien alquiló el salón y lo utilizó para otro fin.