En medio de la fuerte denuncia de violencia de género por parte de Barbie Vélez,Federico Bal estuvo en vivo en Intrusos y contó su relato de los sucesos ocurridos  la noche de terror que vivió con la hija de Nazarena Vélez y la relación tormentosa y enfermiza con la actriz.

"Nunca en la vida le pegué a Barbie, frente el caos que estaba pasando en mi casa ese noche. Puede ser que de ahí venga ese moretón. Frené el ataque.Esto es el final de todo lo que nos pasó", comenzó relatando Bal en vivo.  

"Me da mucha vergüenza estar acá en este momento. Una mujer golpeada hacer una denuncia, ella decidió hacer una tapa de Gente. Ella me denuncia después de que yo la denuncio. Entiendo las reglas del juego, pero estoy muy dolido con Gente. Me están acusando lo que no soy. Nadie sabe el infierno que estaba viviendo, nadie sabe lo que callé por cuidarme, por cuidarla y ahora estoy acá porque no me dejó otra opción", continuó diciendo el actor.

Luego, el hijo de Carmen hizo un resumen de su relación tormentosa con Barbie: "Estoy acá para contar algo y no doy más. Si me dicen que soy un golpeador, me voy a tener que defender, porque no es así".

"Me enamoré perdidamente de una mujer hermosa, con una personalidad tremenda. Con proyectos. Con un talento tremendo. Me hizo ver cosas del amor que no tenía pensado. Sin desmerecer mis anteriores parejas, pero ella me hizo querer formar una familia, querer casarme, tener hijos. Yo era un bardo, me puso en línea. Y hoy lo veo como una dominación. Normalizamos estos celos enfermizos. El sentir que yo te puedo privar de ciertas cosas, de que yo te puedo controlar y se nos fue de las manos", detalló.

"Normalizamos la locura. Le digo a la gente que no normalice esto. No tenes que tener el código del teléfono de tu mujer, no tenes que dejar que te prohíban ver a tus amigos, vos no le tenes que prohibir. Tal vez me domesticaron. Pero a mí me gustaba ver dormir a esa mujer al lado mío", disparó.

La pelea de septiembre

En esta línea, Bal relató cómo fue aquella primera secuencia, en la que apuntaron contra él como violento: "En septiembre se rompió todo, nos gritamos. Fue un escándalo. Se revolearon cosas. Hubo una discusión muy grande en el que Barbie me rompe un wiski. Una puerta.

Yo le digo 'van a pensar que te estoy matando'. Ella estaba gritando. La ponía en la cama. 'Por favor', le decía".

"Nunca le pegué ¿Ahora me denuncia por drogas y alcohol? Pero entiendo son las cartas que cada uno va a jugar ahora. Me da mucha vergüenza. Me duele que la mujer que sigo amando diga las cosas que dije. Si yo soy golpeado, denunciame. El juego es ahora destruirme y arruinarme a mí, mi carrera y todo lo que aprecio. Nos teníamos que haber separado. Normalizábamos la agresión entre ambos. Nos quisimos dejar y no pudimos. Teníamos una relación adictiva", enfatizó.

Su encuentro con Nazarena Vélez, Gonzalo Gamarra y Alejandro Pucheta

"Alejando no me tocó un pelo. No me quisieron tirar por el balcón. Mi mamá está en crisis. Está pasando un momento terrible. No la está pasando bien, está diciendo cosas tremendas que me duelen y no puede entender. No puedo creer lo que dice de Fabián. No avalo lo  que está diciendo. Tengo que ir a un psiquiatra, ya lo sé. Pero ahora tengo que decir mi verdad, y si la gente me baja el pulgar me pongo un maxikiosko", describió.

Fuerte declaración

"Hubo un episodio muy violento donde yo dije ya está donde yo dije esto termina en un homicidio. Un o un episodio donde llamé a Nazarena y le dije 'no puedo más, no puedo controlar a tu hija'. Barbie me encerraba. Ella me sacaba mi celular y las llaves del auto y se encerraba y yo  no podía salir.  Llegamos a un límite y yo le conté hasta donde pude lo que yo estaba viviendo con ella y ella dijo muchas cosas. Tantas presiones. Nos dejábamos de dar felicidad".

La última noche de terror

Por último, Fede Bal contó detalles de cómo fue el último episodio de violencia que desembocó con los moretones de Barbie: "Encuentro mi celular estallado. Me rompió televisor, me rompió el celular. Se fue todo de las manos muy fuerte. Estamos entrando a la zona de peligro. Pero no quería que todo el mundo se entere. Y ahora no voy a mostrar mis golpes, los voy a mostrar en la justicia".

"'Calmate, por favor no me rompas más la casa', le decía. Después de esto ella no se va, ella duerme en  mi pecho, mientras yo le decía 'tranquilizate' y en mi casa estaba todo roto, todo explotado. Ella ve en el teléfono un mensaje de Flor de la Ve que decía "me dijo Laura... Decile que pienso en él... Después de ese mensaje ella cree que sí, que yo la estaba engañando", añadió.

"Ahora va a venir el peor momento de mi vida. No me va a arruinar mi vida, ni mi carrera. Nunca más quiero volver con ella. Tengo dignidad y nadie me va a ensuciar", completó.