Durante este viernes, Monseñor Adolfo Uriona tomó posesión de la Diócesis de Río Cuarto ante una multitud de fieles y autoridades que se congregaron en una gran fiesta de fe.

En su homilía, utilizando el concepto de “imperio”, tal como suele ser conocida la ciudad de Río Cuarto, indicó que el que debe imperar es Cristo, “derramando su amor misericordioso sobre su pueblo”.

En ese sentido, exhortó a que en toda la Diócesis impere el respeto, la contención y el diálogo en las familias; la reconciliación y la paz social y la “cultura del encuentro” como pide el Papa Francisco.

Uriona consideró “hacer memoria del contenido central de nuestra Fe, esto es del núcleo, del corazón de la misma”. En ese sentido, precisó que su llegada a Río Cuarto será para anunciar a un “Cristo crucificado, escándalo para el mundo, pero fuerza y sabiduría de Dios para los que han sido llamados”.

“Ese Señor Crucificado es también el Resucitado, el que venció a la muerte, el Viviente. Él vive en su Iglesia, Pueblo que peregrina en esta historia, dándole fortaleza, y sentido a su caminar…”

En otro sentido, manifestó que ante todo “quisiera ser un Obispo que, como Jesús, esté “en la cosas del Padre”, alimentándose del Evangelio y de la Eucaristía. De esta forma, deseó poder encontrar un espacio interior donde pueda acoger a todos los hombres y mujeres y ser un Obispo que “participe, con aceptación plena y gozosa, de la Cruz de Cristo”.

Ante una multitud de fieles, Uriona señaló que busca ser un obispo “fundamentado en la fuerza del Espíritu” que trabajará incansablemente por “la comunión en la diversidad”.   

La celebración contó con la participación del Nuncio Apostólico Paul Sherrig; Monseñor Ñañez, arzobispo de Córdoba; Mons. Osvaldo Buenanueva, obispo de San Francisco; Mons. Santiago Olivera de Cruz del Eje; Mons. Carlos Torres, auxiliar de Córdoba; Víctor Manuel Fernández, Arzobispo de Tiburnia; Eduardo Eliseo Martìn, Arzobispo de Rosario; Mons. Carlos Tissera, obispo de Quilmes; Mons. Mario Cargnello, obispo de Salta; Mons. Melani, obispo de Neuquén. Tambien acompañaron a Uriona, el obispo de Mendoza, Carlos Franzini;   También estuvieron presentes sacerdotes de Añatuya, y diferentes autoridades ecuménicas.

También participaron de la ceremonia, el gobernador de Córdoba, José Manuel De la Sota; el intendente de Río Cuarto, Juan Jure; funcionarios municipales y provinciales; autoridades sociales, políticas y militares de la ciudad como de la región. 

Fuente: LV16.com - Prensa Obispado